Los probióticos podrían prevenir la diabetes de tipo 1 en niños de alto riesgo
Una flora intestinal sana protege de la autoinmunidad contra los islotes pancreáticos, según un estudio internacional.
Esta es la conclusión del estudio TEDDY (The Environmenal Determinants of Diabetes in the Young), realizado sobre casi 7500 niños y niñas en 6 centros europeos y estadounidenses. El nivel de riesgo de esta población pediátrica fue evaluado desde el nacimiento por genotipadodel HLA y, posteriormente, mediante la monitorización periódica de autoanticuerpos dirigidos contra los islotes pancreáticos.
Después de considerar la influencia de factores como la primera exposición a los probióticos y el uso de los mismos por la madre durante el embarazo, se constató que el inicio de la toma deprobióticos en los 27 días tras el nacimiento se asocia a un riesgo significativamente menor de desarrollar autoanticuerpos. La reducción de riesgo (RR) fue del 44%, en comparación con los niños que empezaron a tomar probióticos más tarde o nunca. El subanálisis por genotipo demostró que la RR fue específica de la población con HLA DR3/4, un genotipo de alto riesgo, en la que la RR alcanzó el 66%.
En la correspondiente publicación, aparecida en la Revista de la Asociación Médica Americana, los autores manifiestan que todavía se requieren estudios adicionales antes de recomendar el uso pediátrico de probióticos en la prevención del a diabetes de tipo 1.
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