jueves, 26 de noviembre de 2015

Una vacuna puede resolver las infecciones urinarias de repetición - DiarioMedico.com

Una vacuna puede resolver las infecciones urinarias de repetición - DiarioMedico.com



POR VÍA SUBLINGUAL

Una vacuna puede resolver las infecciones urinarias de repetición

Las cistitis de repetición podrían atajarse con una inmunoterapia que refuerza la capacidad defensiva de las mucosas.
Sonia Moreno. Madrid   |  25/11/2015 15:49
 
 

Jornadas sobre la vacuna de la cistitis
Rosa Mª Ramos, gerente del Hospital Universitario Santa Cristina; Mª Luz de los Mártires Almingol, Gerente Asistencial de Atención Hospitalaria; Juan Carlos Ruiz de la Roja, responsable del Servicio de Urología del Hospital Santa Cristina, y Carmelo García Monzón, coordinador de Formación Continuada del Hospital Santa Cristina. (DM)
Cerca de la mitad de las mujeres sufren una infección del tracto urinario en algún momento de su vida, y un 30 por ciento la presentan de forma recurrente; son las infecciones urinarias de repetición, definidas con al menos dos episodios en un periodo de tres meses o más de tres al año.
El tratamiento antibiótico no suele solucionar el problema de las infecciones de repetición, pues como comenta a DM Juan Carlos Ruiz de la Roja, responsable del Servicio de Urología del Hospital Universitario Santa Cristina (Madrid), "los antibióticos actúan de forma puntual, pero las mujeres con infecciones urinarias de repetición tienen un déficit inmunitario en las mucosas, que explica esa mayor propensión". La inmunoterapia contribuiría a solventar el déficit, según lo expuesto durante una jornada organizada por el citado servicio de Urología sobre el uso de la vacuna para prevenir la infección urinaria.
Existen diversos tipos de vacunas para evitar la cistitis. El grupo de Ruiz de la Roja trabaja con una inmunoterapia que contiene cuerpos enteros de bacterias seleccionadas inactivadas y que se administra por vía sublingual, a través de un nebulizador o con gotas.
La vacuna se toma en dosis diarias durante tres meses y ofrece una amplia protección durante el primer año, que puede prolongarse bastante más. No obstante, si tras la inmunización surgen nuevas recaídas, la paciente se puede revacunar sin riesgo de efectos secundarios ni toxicidades.
Desde el punto de vista inmunitario, se sabe que la estimulación de la mucosa oral puede tener un efecto en la mucosa distante, y en ello se basa esta estrategia: "Al realizar la vacunación en la mucosa sublingual, potenciamos la inmunidad en el resto de mucosas del cuerpo, tales como la vaginal y la vesical, gracias al aumento de las células plasmáticas y, en especial, de la producción de la IgA mucosa; de hecho, con la vacuna se eleva en un 80 por ciento el nivel de la IgA en mucosas, y aumentan los linfocitos T CD4 y T CD8, elementos clave en la respuesta a la infección".
De esta forma, la persona vacunada lucha contra la progresión del microorganismo y evita así nuevas infecciones.
Ruiz de la Roja destaca los buenos resultados de la inmunización, avalados con estudios como los publicados por el grupo de María Fernanda Lorenzo Gómez, de la Universidad de Salamanca, en International Urogynecology Journal. Lorenzo ha participado en las jornadas presentando los datos de sus investigaciones, como la publicada recientemente en Frontiers in Cellular and Infection Microbiology, donde se compara con éxito la vacuna frente a la profilaxis antibiótica.
Para el urólogo, cada vez se busca personalizar más la vacuna: "Ahora intentamos que el porcentaje de los microorganismos incluidos se adecúe lo máximo posible a la proporción que vemos en las muestras de las pacientes. Así, cada vacuna puede incluir diferentes combinaciones de patógenos, tales como Escherichia coli o Klebsiella, dependiendo de cada caso". Diferente es la llamada autovacuna, también empleada por el equipo de Ruiz de la Roja, que se elabora de forma individualizada en el laboratorio a partir de réplicas de los gérmenes identificados en las muestras de las pacientes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario