Reducir la presión sistólica por debajo de los 120 mm Hg salva vidas
En pacientes de alto riesgo cardiovascular, reduce el riesgo de infarto, accidente cerebrovascular y muerte.
Estas son las conclusiones del estudio aleatorizado SPRINT, que ha comparado los beneficios de derivados de la reducción de la presión arterial sistólica (PAS) por debajo de 120 o 140 mm Hg. El argumento de que una PAS menor es mejor ha quedado sustanciado por la constatación de que una reducción por debajo de 120 mm Hg disminuye el riesgo de muerte y eventos cardio- y cerebrovasculares un 25%.
El ensayo incluyó más de 9,000 pacientes mayores de 49 años con una PAS basal de al menos 130 mm Hg, que fueron aleatorizados a recibir tratamiento intensivo con el objetivo de reducir la PAS por debajo de 120, o estándar para reducirla o mantenerla por debajo de 140. A los 3,26 años, el valor de las respectivas PAS fue de 121 y 136, que se asociaron con unas tasas de mortalidad de 1,65 y 2,19 % por año, respectivamente. El tratamiento intensivo también tuvo un impacto positivo en la incidencia de síndromes coronarios agudos y en el fallo cardíaco, siendo este último el factor decisivo en la reducción de la mortalidad. De los resultados se desprende que se salva una vida por cada 172 pacientes tratados de manera intensiva.
Paul K. Whelton, uno de los directores del SPRINT (foto, MedPage Today), ha enfatizado que la reducción por debajo de 120 se ha conseguido utilizando fármacos convencionales. Sin embargo, el beneficio en este ensayo también ha tenido su coste, ya que un número significativamente mayor de pacientes menores de 76 años tratados intensivamente sufrió efectos adversos serios relacionados con la terapia. En los pacientes de edad superior, la incidencia de efectos adversos fue similar en ambos grupos de tratamiento.
Los resultados de este ensayo podrían espolear un cambio en las directrices actuales, que recomiendan una PAS < 150 mm Hg en pacientes ancianos.
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