La diabetes ya tiene otra enemiga

Ha desarrollado un modelo murino de progresión de la enfermedad. Su grupo evalúa la terapia génica utilizando virus adenoasociados. La SEBBM le ha otorgado el Premio Científico Margarita Lorenzo 2015.

Alejandro Segalás. Salamanca | dmredaccion@diariomedico.com | 16/11/2015 00:00

Sabela Diaz-Castrovela, bioquímica de la Universidad Complutense de Madrid. (DM)

Sabela Díaz-Castroverde (Pontevedra, 1987) ha comenzado a dar sus primeros pasos en la carrera científica y centra sus esfuerzos en la investigación de la diabetes tipo 2. Su grupo del departamento de Biología Molecular y Bioquímica de la Universidad Complutense de Madrid ha desarrollado un modelo murino de progresión a la diabetes tipo 2, iLIRKO (inducible Liver Insulin Receptor KnockOut) en el que están probando el papel diferencial de cada una de las isoformas del receptor de insulina. "Para ello, hemos abordado el objetivo desde la terapia génica con virus adenoasociados (AAV), lo que nos ha permitido expresar una de las dos isoformas del receptor de insulina en el hígado", explica a Diario Médico la investigadora, que matiza que "los resultados muestran que la expresión de la isoforma A, y no la B, disminuye la hiperglucemia y revierte la hiperplasia pancreática derivada de los mecanismos compensatorios propios de la diabetes tipo 2"

"Estamos probando el papel diferencial que juega cada una de las isoformas del receptor de insulina. La terapia génica con virus adenoasociados nos permite expresar una de ellas en el hígado"

El proyecto más inmediato del grupo de Díaz-Castroverde es probar el efecto de estos virus en otros modelos de resistencia a insulina, como la inducida por obesidad. Quieren saber si la isoforma A del receptor de insulina es capaz, tal y como lo hace en el modelo iLIRKO, de disminuir la hiperglucemia. No obstante, la científica gallega no podrá seguir desarrollando esta línea de investigación, ya que su contrato termina el próximo mes de diciembre y sin posibilidad de prórroga.

Recientemente, durante el XXXVIII Congreso de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM), celebrado en Valencia, Díaz-Castroverde recibió el Premio Científico Margarita Lorenzo 2015 por su estudio sobre el uso de terapia génica para el tratamiento de la diabetes tipo 2. Este galardón va dirigido a jóvenes investigadores menores de 35 años y, además de un homenaje a la doctora Lorenzo, tiene como objetivo identificar e impulsar la investigación de calidad en un tema de gran relevancia clínica y social.

"Los resultados muestran que la expresión de la isoforma A, y no la B, reduce la hiperglucemia y revierte la hiperplasia pancreática debida a los mecanismos de compensación propios de la diabetes tipo 2"

Retos científicos
Como previsión a medio y largo plazo en el campo de la diabetes, la investigadora considera que hay varias líneas principales de investigación: la mejora de los fármacos existentes, la regeneración con células madre de las células β pancreáticas, así como una tercera posibilidad emergente y por desarrollar: el uso de la terapia génica.

"Es cierto que fuera de España los recursos son mayores, pero la calidad de los investigadores de nuestro país es innegable. El problema es que esto no basta para desarrollar proyectos ambiciosos"

Además, Díaz-Castroverde recuerda que el nivel investigador de la ciencia española es destacado. "Es cierto que fuera de España los recursos son mayores, pero la calidad de los investigadores de nuestro país es innegable", incide, mientras que pone de manifiesto que "el problema sigue siendo que esto no es suficiente para desarrollar proyectos de investigación ambiciosos". Habla desde la experiencia, ya que disfrutó de una estancia científica en la Universidad de Columbia, en Nueva York.

Esta científica gallega menor de 35 años se encuentra ahora con el abismo de la falta de oportunidades y con el peligro de que su carrera científica sufra un retroceso o desaceleración por la inestabilidad laboral. Por desgracia, una de las preguntas que salen cuando se conversa con una joven científica como ella es: ¿cómo decidió ser investigadora con la multitud de problemas que conlleva en los últimos años? La respuesta de Sabela Díaz-Castroverde es que "con 18 años se hacen muchas locuras, pero, al final, uno persigue lo que verdaderamente le gusta". De nuevo, la vocación científica empuja a los jóvenes a desplegar todo su talento.

Una bioquímica con clara inclinación biomédica

Sabela Díaz-Castroverde Vicario se licenció en 2010 en Bioquímica en la Universidad Complutense de Madrid, centro en el que cursó a continuación un máster de Biología, Bioquímica y Biomedicina. Después pasó a formar parte del departamento de Biología Molecular y Bioquímica de esta institución académica. Durante su corta, pero intensa, carrera científica ha tenido la oportunidad de disfrutar de dos estancias de investigación en otros centros. De septiembre a diciembre de 2014 en la Universidad de Columbia en Nueva York, en Estados Unidos, bajo la dirección de Rebecca Hacusler. En 2013, de mayo a julio, estuvo en la Universidad de Navarra en el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) bajo la tutela de Gloria González. En congresos nacionales e internacionales ya acumula 13 participaciones destacadas con trabajos de relevancia, mientras que en su producción científica, en cuanto a publicaciones, destacan cuatro artículos en revistas de primera línea de impacto y en estos momentos se encuentra trabajando en otros dos.

Otros proyectosTambién ha participado en dos líneas de investigación con temáticas muy diferentes a la que ahora desarrolla. Entre 2010 y 2011 estuvo en el proyecto Pathophysiology of glutamate transporters del Ministerio de Ciencia e Innovación, dirigido por María Jesús Oset Gasque, mientras que entre 2009 y 2010 formó parte del programa Role of H?ras and N?ras in the development and pathophysiology of Th17 cells, dirigido por Edgar Fernández Malave, de la Universidad Complutense de Madrid.