La guía GEMA actualiza el asma no controlada y la comorbilidad

La cuarta edición recoge el consenso de 101 expertos y trece sociedades científicas. El principal objetivo es incrementar la formación de los profesionales sanitarios.

Redacción. Madrid | 04/05/2015 16:57

Vicente Plaza, Soledad Alonso y Santiago Quirce, en la presentación de la nueva edición de la guía GEMA. (DM)

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El 5 de mayo se celebra el Día Mundial del Asma, una enfermedad inflamatoria crónica cuya incidencia continúa en aumento y que afecta en España al 5 por ciento de la población adulta y a un 12 por ciento de la población infantil, según cifras de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ).

Con el objetivo de mejorar el control y la calidad de vida de estos pacientes, se acaba de publicar la cuarta edición de la Guía Española para el Manejo del Asma (GEMA4.0). Se trata de un consenso de 101 expertos en asma -representantes de trece sociedades científicas (GRAP, Seaic, Sefac, SEFC, Seicap, Semergen, Semes, semFYC, SEMG, SENP, Seorl, Separ y Sepeap) y la Federación Nacional de Asociaciones de Enfermedades Respiratorias (Fenaer)-.

Como recuerda Pilar de Lucas, presidenta de la Separ, "con GEMA buscamos incrementar la formación de todos los profesionales sanitarios implicados en la atención de las personas afectadas por el asma".

El coordinador del comité ejecutivo de la guía, Vicente Plaza, ha destacado durante la presentación del documento a los medios de comunicación que, "además de la necesaria actualización del contenido científico, se han incorporado tres nuevos capítulos con respecto a la última edición, de 2009: Asma y EPOC, Asma grave no controlada y Plan de difusión y de implementación (de GEMA 4.0)".

Cabe destacar que asma y EPOC pueden coexistir en un mismo paciente. Esta coincidencia se estima en un 12 por ciento; para que tenga relevancia clínica, debe influir en el pronóstico y en la actitud terapéutica. Los pacientes con EPOC que también tienen asma presentan un mayor riesgo de padecer exacerbaciones.

"Posiblemente en el futuro se superarán los compartimentos estancos que separan a pacientes de EPOC y de asma, y se avanzará hacia un concepto global de enfermedad de la vía aérea que, en cada sujeto, se relacionará con un patrón inflamatorio definido ligado a manifestaciones clínicas, determinantes pronósticos y tratamientos específicos (más eficaces)", ha añadido el también jefe del Servicio de Neumología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, de Barcelona.
Otro aspecto novedoso de la guía alude al asma grave no controlada (AGNC), definida por haber recibido tratamiento en el último año sin alcanzar el adecuado manejo. Afecta a un 4 por ciento de los pacientes y consume más recursos económicos en comparación con casos moderados o leves. "La evidencia clínica a este respecto resulta de tan baja calidad que la mayoría de las recomendaciones que se proponen -y la GEMA4.0 no está exenta- se basan en opiniones de expertos", según Plaza.

Santiago Quirce, coordinador representante de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic) y jefe del Servicio de Alergología del Hospital Universitario La Paz, de Madrid, ha pedido a la administración sanitaria "el desarrollo de un Plan Nacional para el Asma, la creación de más consultas monográficas de AGNC en el sistema nacional de salud, y la mejora del conocimiento sobre la enfermedad".

Por su parte, Soledad Alonso, vicepresidenta de Fenaer, ha dicho que "ha mejorado de forma importante los mecanismos de administración de medicamentos antiasmáticos y hay nuevos fármacos que demuestran su efectividad".

Infradiagnóstico
El infradiagnóstico y el mal control de la enfermedad consumen recursos importantes. Hay pacientes que no están identificados y, en cambio, otros diagnosticados de asma que no la padecen. "Para que eso no ocurra es necesario hacer espirometrías de forma sistemática en atención primaria y remitir los casos sospechosos que no hayan podido diagnosticarse solo con la espirometría al especialista", afirma Eva Martínez Moragón, coordinadora del Área de Asma de la Separ.

Una base de datos para investigar con fundamento

El Centro de Investigación Biomédica en Red de Enfermedades Respiratorias (Ciberes) ha puesto en marcha una base de datos de pacientes asmáticos en España que permitirá investigar sobre esta enfermedad de una forma más eficaz. El asma, cuyo Día Mundial se celebra hoy, afecta en España a 3 millones de personas y constituye un problema creciente de salud.

Esta base de datos del Ciberes, en la que participan actualmente siete centros hospitalarios, está ya construida y lista para comenzar a incorporar datos de los pacientes. Se incluirán datos demográficos, clínicos, de control de la enfermedad, de uso de medicación o de antecedentes familiares, además de los resultados de las pruebas analíticas realizadas a los afectados. "A lo largo del próximo año tenemos previsto recoger datos de un centenar de pacientes, y seguiremos incorporando más información durante al menos los cuatro años que dure el estudio, aunque nuestra intención es que los afectados, y por lo tanto la evolución de su enfermedad, se puedan seguir estudiando durante más tiempo", ha explicado Victoria del Pozo, coordinadora del Programa Corporativo de Asma del Ciberes y miembro del Instituto de Investigación Sanitaria-Fundación Jiménez Díaz.

Optimizar recursos
Gracias a la colaboración de los siete grupos se podrán optimizar recursos, y reducir así el tiempo que se tarda en trasladar los resultados a la práctica asistencial. "Así, en última instancia, se mejorará la salud de los pacientes asmáticos, y se aumentará su calidad de vida y su bienestar", añade Del Pozo.

Entre las líneas de trabajo encaminadas a entender mejor la enfermedad en su conjunto y su complejidad, cita la investigación en la epigenética, el papel de las infecciones virales o bacterianas y el estudio de los factores de riesgo. "Debemos aproximarnos a la medicina de sistemas, integrando todos los elementos que participan en esta patología, y al mismo tiempo avanzar en la personalización".