Fumadora: la nueva cara del cáncer de pulmón

Mientras la incidencia del cáncer de pulmón está bajando entre los varones, aumenta en las mujeres como consecuencia del consumo de tabaco.

Sonia Moreno. Madrid | soniamb@diariomedico.com | 20/11/2014 17:24

Los oncólogos Bartomeu Massuti y Mariano Provencio, en el Simposio Internacional del GECP. (Lenda)

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Cada año se diagnostican más de 20.000 españoles con cáncer de pulmón, de los que un 80 por ciento son varones. No obstante, la tendencia es que cada vez haya un mayor porcentaje de mujeres afectadas por esta enfermedad, mientras desciende en los hombres. "La incidencia del cáncer de pulmón en la población masculina española alcanzó su pico hacia la segunda mitad de la década de 1990; desde entonces disminuye, justo lo contrario de lo que se observa en las mujeres, que se incorporaron más tarde al hábito tabáquico", ha apuntado Mariano Provencio, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Puerta de Hierro, de Majadahonda (Madrid), durante la presentación a los medios del VII Simposio Internacional del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP).

En España, la mortalidad por cáncer de pulmón equivale a la suma de la causada por el cáncer de colon, mama y páncreas juntos

Esta reunión científica, que termina hoy en Madrid, es una puesta al día del cáncer pulmonar en todas sus vertientes. Desde la perspectiva epidemiológica, llama la atención el hecho de que las féminas españolas parezcan menos sensibles a las políticas antitabaco de los últimos años.

Estas medidas normativas han reducido en España el número de fumadores en un 25 por ciento. Sin embargo, como ha matizado Bartomeu Massuti, jefe del Servicio de Oncología del Hospital General de Alicante, y secretario del GECP, "la tasa de fumadores en la población de 15 a 24 años es idéntica entre hombres y mujeres". De este dato se podría extrapolar, siempre con cautela, que en treinta años la incidencia del cáncer pulmonar será la misma para los dos sexos.

Además de recordar la importancia de concienciar a la población sobre el perjuicio del tabaco, los especialistas se han referido a los tumores que no se asocian directamente con la adicción y que suponen ya el 20 por ciento de los diagnósticos. Aquí parece que influirían elementos como el tabaquismo pasivo, la contaminación -reconocida recientemente por la Organización Mundial de la Salud como un factor de riesgo- y la exposición al gas radón.

Rasgos moleculares
En esos tumores no asociados directamente al tabaco se han identificado rasgos moleculares, como el gen del receptor de factor de crecimiento epidérmico (EGFR), para los que hay fármacos específicos que han supuesto un aumento de la supervivencia. Esto podría ser el inicio del hallazgo de otros factores moleculares y genéticos que funcionen como dianas terapéuticas, pero para ello es preciso fomentar la investigación traslacional, interdisciplinar y multicéntrica, como la que promueve el GECP.

Massuti ha destacado también que habría que mejorar la organización del estudio de las alteraciones genéticas en estos pacientes oncológicos. "Al igual que en otros países, las pruebas deberían realizarse de manera centralizada, en laboratorios preparados para hacer esos test moleculares de forma que se garantice la calidad y eficacia, lo que además sumaría información con la que poder identificar nuevas alteraciones".