Los fitoesteroles, aliados terapéuticos

Estos productos reducen un 10 por ciento adicional el nivel de colesterol. Una nueva guía recomienda el uso clínico de los esteroles vegetales. Mejoran resultados en los enfermos que responden mal a las estatinas.

Karla Islas Pieck. Barcelona | karla.islas@diariomedico.com | 28/02/2014 15:16

Los esteroles y estanoles de origen vegetal son capaces de reducir en un 10 por ciento el nivel del colesterol LDL-C en sangre, por lo que los alimentos ricos en estas sustancias representan un buen aliado con un gran potencial en el abordaje de la hipercolesterolemia, según ha quedado de manifiesto en el XXVII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Arteriosclerosis (SEA), que se ha celebrado en Barcelona.

Lluís Masana: La introducción de estos complementos dietéticos tiene un impacto positivo en el paciente y es más fácil que siga otras recomendaciones de dieta sana y hábitos de vida saludables

Durante una mesa redonda patrocinada por Danone y moderada por Fernando Civeira, presidente de la SEA y Juan Pedro-Botet, director de la Unidad de Lípidos y riesgo Cardiovascular del Hospital del Mar, de Barcelona, se presentó la guía denominada Recomendaciones para la utilización clínica de los alimentos enriquecidos con fitoesteroles/fitoestanoles en el manejo de la hipercolesterolemia, en la que se describe que estos productos, además de reducir el colesterol, ayudan a disminuir el riesgo cardiovascular en los pacientes.

El documento, que ha sido elaborado por un grupo de expertos de la SEA, avala la prescripción de estanoles y esteroles vegetales para debutantes de hipercolesterolemia, pero también para aquéllos enfermos que ya están en tratamiento farmacológico con fármacos hipolipemiantes -como las estatinas- para este trastorno, pero que no responden de manera adecuada y no consiguen los objetivos clínicos establecidos.

Jogchum Plat: Hay muchas teorías que intentan explicar por qué los esteroles vegetales reducen el colesterol LDL-C y probablemente todas son reales, pero debemos seguir investigando esta línea

Según los últimos datos que constan en la literatura científica, en España sólo el 55,7 por ciento de los pacientes que han iniciado la terapia farmacológica logran controlar de forma adecuada el nivel de colesterol, lo que pone sobre la mesa la necesidad de buscar mejores estrategias.

Durante su intervención, Eric Bruckert, jefe del Servicio de Endocrinología y Metabolismo en el Hospital de la Pitié-Salpêtrière, en París (Francia), precisó que los últimos trabajos científicos demuestran que esta reducción del 10 por ciento en los niveles del colesterol LDL-C que consiguen los esteroles y estanoles vegetales se suma a lo que se logra por medio del tratamiento farmacológico, lo que los postula como un complemento ideal para los pacientes refractarios al tratamiento convencional.

Eric Bruckert: La reducción del riesgo cardiovascular en los pacientes con hipercolesterolemia es similar independientemente del método por el que se consiga la reducción del colesterol LDL-C

En concreto, los últimos estudios demuestran que doblar la dosis de las estatinas en los enfermos con niveles de colesterol altos consigue aumentar el efecto en un 6 por ciento, en contraste con la reducción del 10 por ciento adicional que se alcanza con un suplemento de fitoestanoles de entre 1,5 y 2,4 gramos por día.

Además, este efecto beneficioso tiene un impacto importante en la reducción del riesgo cardiovascular, ya que, según las últimas evidencias, la disminución de entre 8 y 27 mg de colesterol por litro de sangre reduce hasta en un 21 por ciento la probabilidad de presentar un problema cardiovascular. "El beneficio es similar independientemente del método de reducción que se utilice", según puntualizó Bruckert.

El momento importa
El principio matemático de que el orden de los factores no altera el producto no se puede aplicar en el caso de los fitoestanoles. Los datos obtenidos hasta ahora en la investigación sugieren que los efectos de los productos enriquecidos con fitoesteroles y fitoestanoles son mayores si se consumen durante los alimentos y no en ayunas. Lo más recomendable sería tomarlos en cada comida y, si se consumen en una única dosis diaria, un momento ideal sería como postre al medio día.

Jogchum Plat, profesor de Fisiología Humana en la Universidad de Maastricht (Holanda), ha detallado que, aunque está muy claro que estos productos de origen vegetal minimizan la absorción de colesterol LDL-C por parte del organismo, el mecanismo concreto que hay detrás de este proceso aún resulta un enigma para la ciencia y es objeto de diversos trabajos de investigación; "hay muchas teorías y probablemente todas son reales, pero es necesario seguir investigando en este campo", a juicio de Plat.
Una de las cosas que parecen claras es que los fitoesteroles y fitoestanoles se comportan de manera similar que el colesterol en el tejido humano pero su absorción por parte del organismo es mucho menor. Actualmente los científicos trabajan para desentrañar el mecanismo responsable de este proceso.

Por su parte, Lluís Masana, director del Departamento de Medicina Interna y de la Unidad de Lípidos y Riesgo Cardiovascular en el Hospital Universitario Sant Joan y director del Instituto de Investigación en Ciencias de la Salud-Fundación Ircis en la Universidad Rovira i Virgili, en Tarragona, destacó que se ha podido comprobar que el consumo de productos enriquecidos con fitoestanoles y fitoesteroles facilita la adherencia de los pacientes a otros hábitos de vida saludables, como seguir una alimentación equilibrada o la práctica regular de ejercicio físico, lo que además se traduce en una disminución del nivel de triglicéridos.

En este sentido, hizo hincapié en que la suplementación con fitoesteroles tiene un potencial especial en el grupo de pacientes que presentan un nivel elevado de colesterol pero un riesgo cardiovascular bajo y que, por tanto, no son tributarios de tratamiento farmacológico, "pero intervenir sobre su estilo de vida tiene un papel interesante que se debe valorar seriamente".

Según la bibliografía, la mitad de los adultos españoles presenta concentraciones plasmáticas elevadas -superiores a 200 miligramos por decilitro- lo que duplica el riesgo de sufrir enfermedad cardiovascular. Además, está demostrado que, de todos los factores de riesgo cardiovascular, la hipercolesterolemia, junto con el sobrepeso, son los que mejor se pueden contrarrestar por medio de hábitos dietéticos y un estilo de vida saludable.