VIDEOBLOG | Cáncer de colon y recto
Muchas muertes evitables
Buena parte de los que peinamos canas seguro que recordamos un grupo musical famoso en los años 70. Los Bee Gees. Eran tres hermanos que formaban una banda de prestigio mundial presentes en el abanico en el que también estaban los Beatles y los Rolling Stones. Uno de sus miembros, Robin Gibb, acaba de fallecer a los 62 años. Es noticia en casi todos los medios del mundo. Fue víctima de un cáncer de colon. Cuando le detectaron el problema, el tumor tenía ya metástasis y la cirugía y la quimioterapia al que fue sometido no han logrado gran cosa.
Los tumores de colon y de recto se están convirtiendo, junto con los de pulmón, en las dos causas más importantes de muerte por cáncer en el mundo. Uno y otro se reparten un porcentaje cada vez más alto de las razones de los fallecimientos. Lo triste es que tanto uno como otro son cánceres que pueden evitarse o al menos diagnosticarse de una forma precoz y extirparse. Si no existiera el tabaco, el cáncer de pulmón sería una rareza. Si los seres humanos, cumplidos los 50, pensaran en su colon y persiguieran diagnósticos precoces de lo que puede ocurrir en su intestino grueso la mortalidad del cáncer colorrectal caería de manera muy drástica.
Ayer mismo se publicó en el 'New England Journal of Medicine' un trabajo interesante en que se afirmaba que la sigmoidoscopia es también un procedimiento de valor para tratar de bajar la letalidad de estos tumores.
Existen tres procedimientos validados para diagnosticar cáncer de colon precozmente. Uno de ellos es la colonoscopia. Es el mejor de los métodos aunque requiere anestesia, preparación incomoda. Difícil de generalizarse, otro, las hemorragias ocultas en heces. Tiene menos sensibilidad y especificidad pero es mucho más fácil y barato.
Ahora, en medio de los dos se ha colocado, la sigmoidoscopia flexible. Consiste en llegar con un instrumento hasta la parte baja del colon, que se la conoce como el sigma, donde suelen estar un porcentaje muy alto de los pólipos y los cánceres. Es más fácil de realizar que la colonoscopia, no suele necesitar sedación y tiene una preparación más sencilla.
El cualquier caso lo bueno es que se siga acumulando evidencia científica de lo que puede dar de sí la prevención primaria del cáncer de colon. Porque hacerla, hay que hacerla.
Los tumores de colon y de recto se están convirtiendo, junto con los de pulmón, en las dos causas más importantes de muerte por cáncer en el mundo. Uno y otro se reparten un porcentaje cada vez más alto de las razones de los fallecimientos. Lo triste es que tanto uno como otro son cánceres que pueden evitarse o al menos diagnosticarse de una forma precoz y extirparse. Si no existiera el tabaco, el cáncer de pulmón sería una rareza. Si los seres humanos, cumplidos los 50, pensaran en su colon y persiguieran diagnósticos precoces de lo que puede ocurrir en su intestino grueso la mortalidad del cáncer colorrectal caería de manera muy drástica.
Ayer mismo se publicó en el 'New England Journal of Medicine' un trabajo interesante en que se afirmaba que la sigmoidoscopia es también un procedimiento de valor para tratar de bajar la letalidad de estos tumores.
Existen tres procedimientos validados para diagnosticar cáncer de colon precozmente. Uno de ellos es la colonoscopia. Es el mejor de los métodos aunque requiere anestesia, preparación incomoda. Difícil de generalizarse, otro, las hemorragias ocultas en heces. Tiene menos sensibilidad y especificidad pero es mucho más fácil y barato.
Ahora, en medio de los dos se ha colocado, la sigmoidoscopia flexible. Consiste en llegar con un instrumento hasta la parte baja del colon, que se la conoce como el sigma, donde suelen estar un porcentaje muy alto de los pólipos y los cánceres. Es más fácil de realizar que la colonoscopia, no suele necesitar sedación y tiene una preparación más sencilla.
El cualquier caso lo bueno es que se siga acumulando evidencia científica de lo que puede dar de sí la prevención primaria del cáncer de colon. Porque hacerla, hay que hacerla.
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